La ULA propone un salto a la modernidad para los barrios Pueblo Nuevo y Simón Bolívar

**Estos dos sectores populares de Mérida dejarían de estar “abajo” o “detrás” de la ciudad, para integrarse plenamente a ella. Los autores del proyecto quieren mostrar su propuesta a autoridades como Alcaldía y Gobernación, pero especialmente, a las comunidades organizadas de ambos sectores

La arquitecta Andreína Rojas dijo la frase que resumió el objetivo más importante de su trabajo: “queremos que los barrios Pueblo Nuevo y Simón Bolívar de Mérida dejen de verse ´como sectores escondidos allá abajo al lado del río` y se integren plenamente al casco central de la ciudad”.

En efecto, estas dos comunidades merideñas tienen dos nombres distintos  y las separa una pequeña quebrada, pero conforman una misma comunidad al borde del río Albarregas y desde hace muchos años, se han integrado al casco central histórico de Mérida. Bajando o subiendo las largas y emblemáticas escaleras, sus habitantes están en pocos minutos en la plaza Bolívar. Desde mediados del siglo XX fueron creciendo en población y casas  y, como el resto de la ciudad, tienen problemas urbanos pero varias fortalezas que pueden hacer del sector, un barrio modelo en nuestro país.

Estas fortalezas y debilidades fueron las que vieron los arquitectos y arquitectas Alejandra Rojo, Andreína Rojas, Edna Ramírez, Julio Castillo y Mariaelisa Quintero, para promover un proyecto de rehabilitación que, de llevarse a cabo, transformaría radicalmente, no sólo a los mencionados sectores, sino al propio centro de la ciudad y la avenida Las Américas, en el sector La Liria.

Un trabajo de postgrado
El proyecto fue realizado por los estudiantes de la Mención Diseño Urbano de la Décima Cohorte del Programa de Postgrado en Desarrollo Urbano Local de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad de Los Andes, durante el desarrollo del Taller de Diseño Urbano III. El tema de este taller es Desarrollos no Controlados, y fue coordinado por los profesores Beatriz Febres Cordero, Jorge Negretti y Ramiro Prato Vicuña.

El nombre es largo. “Propuesta de diseño urbano para valorizar los espacios públicos  en desarrollos no controlados del estado Mérida. Pero la esencia del trabajo es simple: revalorizar y transformar totalmente a los barrios Pueblo Nuevo y Simón Bolívar.

El profesor Ramiro Prato Vicuña, encargado del Taller de Diseño Urbano III, explicó que el objetivo es aplicar conceptos como sustentabilidad y ecología urbana para mejorar la calidad de vida de los habitantes y ofrecer una nueva imagen urbana a un sector calificado dentro de los desarrollos no controlados. Estos son tradicionalmente aquellas comunidades que van surgiendo espontáneamente y creciendo de acuerdo a como sus primeros y posteriores habitantes lo consideran, de acuerdo a las posibilidades del terreno, servicios públicos, avenidas y transporte y conexiones con los centros de la ciudad.

Transformaciones radicales
De acuerdo con el proyecto de los cinco arquitectos, “el objetivo es elaborar una propuesta  que ordene la agrupación formada por los desarrollos no controlados del sector Ámbito Central Parque Albarregas, en este caso los barrios Pueblo Nuevo y Simón Bolívar. Se trata de una propuesta de los alumnos del postgrado que mereció 20 puntos, y que en forma de ponencia fue expuesta en el  Primer Congreso Internacional de Arquitectura y Ambiente de Salta, Argentina, en noviembre del 2009, y en el Cuarto Seminario  de Espacios Públicos y Ciudades Intermedias, realizado en la Facultad de Arquitectura y Diseño de la ULA  en ese mismo mes.

¿Cuáles son los aspectos más novedosos de este proyecto de valorización de Pueblo Nuevo-Simón Bolívar? Son muchos. Hay que tomar en cuenta que el proyecto abarca desde el sector de la Plaza de Toros “Román Eduardo Sandia” hasta prácticamente el viaducto Campo Elías.

Se propone convertir el sector de la Plaza de Toros en un verdadero complejo recreativo-ferial-cultural, techando el coso taurino, con estacionamientos subterráneos, reubicación y rehabilitación de la manga de coleo, un puente peatonal que conectaría el sector de la Plaza de Milla desde la avenida 1 hasta el sector Plaza de Toros en la avenida Las Américas. Este puente implicaría la transformación total de lo que antiguamente se conoció como La Gallera y hoy es un centro cívico para la comunidad. Un nuevo edificio más acorde con las actividades que allí se realizan lo remplazaría.

Bosques ecológicos, ascensores y paseos artesanales
Las famosas escaleras de la avenida 2 Lora se conservarían, pero también se construiría un ascensor para comodidad de los habitantes y visitantes, acompañado de varios ejes trasversales como puentes y escaleras en varios puntos, que conecten la avenida 2 con la avenida Las Américas.

Debido a su peligrosidad, se reubicarían las viviendas al margen del río Albarregas, siguiendo como patrón 15 metros de retiro del curso de agua. Por eso se propone una zona para nuevos desarrollos habitacionales a los fines de reubicar a las familias de estas casas. 

Con el retiro de las casas en riesgo se consolidaría el río Albarregas como atractivo turístico (se apuesta a su saneamiento y descontaminación a futuro), con el diseño de un paseo comercial artesanal paralelo al mismo, como sustento económico adicional para los habitantes del sector, muchos de los cuales son artesanos reconocidos. En la margen derecha del río de plantea una senda ecológica, para recuperar el talud de la meseta, con conexiones transversales y longitudinales, para deportes como ciclismo, escalada, rapel, etc.

Se propone ubicar en puntos estratégicos módulos de equipamiento comunitario de tipo educacional, asistencial, cultural, recreacional y deportivo, entre ellos la instalación de una escuela de fútbol menor. Muchas casas en riesgo de la avenida 2 Lora desaparecerían para dar paso a hoteles y posadas tipo mirador y paseos peatonales.

Una obra importante sería el puente peatonal que iría desde las famosas escaleras hasta empalmar con la avenida Las Américas, que además de conectar ambas avenidas, permita integrar social y funcionalmente a los barrios Pueblo Nuevo y Simón Bolívar. Este puente peatonal culmina en un distribuidor en Las Américas a la Altura de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales. El proyecto propone, por supuesto, la total renovación de las fachadas y techos de las casas, calles, aceras y pasajes, además de la consolidación de manzanas como parques vecinales.