Autoridades Universitarias presentes en el acto. (Foto: Ramón Pico.)

El pasado jueves 20 de noviembre del presente año en el Paraninfo de la Ilustre Universidad de los Andes, se congregó un grupo bastante significativo de Médicos Cirujanos, quienes conformaron hace veinte años la recordada promoción “Honor a Mis Padres”, cohorte egresada orgullosamente de esta casa de estudios en 1994.

En este acto emotivo los Médicos presentes recordaron su paso por esta Universidad y se reencontraron con sus Padrinos, Desiderio Rincón Pacheco y Carlos Marín, quienes les acompañaron a recibir su respectivo Diploma de manos del Rector Mario Bonucci Rossini, quien en compañía de la Doctora Patricia Rosenzweig Levy, Vicerrectora Académica y del Profesor Gerardo Tovitto, Decano de la Facultad de Medicina, presidieron esta importante actividad, donde extrañaron la presencia de otro de sus Padrinos, el Doctor Pedro Rincón Gutiérrez.

Dr. Desiderio Rincón Pacheco recibió placa de reconocimiento. (Foto: Ramón Pico)

Luego de recibir sus Diplomas, fueron entregadas dos placas de reconocimiento, primeramente al Doctor Desiderio Rincón Pacheco, quien recibió de manos de los  Doctores Humberto López y Marialexandra Ramos, y luego al Doctor Carlos Marín, quien recibió de manos de los Doctores Gabriel Rincón y Belkis Chacín.

Posteriormente y en representación de los integrantes de la Promoción fueron dirigidas unas palabras por la Doctora Marialexandra Ramos, quien en su discurso recordó a sus compañeros ausentes,  bien sea, porque decidieron cruzar fronteras en la búsqueda de nuevas posibilidades, o porque, partieron a una vida eterna, para  ellos pidió mantener una oración permanente.

Dra. Marialexandra Ramos ofreció las palabras en representación de sus compañeros.(Foto: Ramón Pico.)

La Doctora Ramos manifestó, que a pesar de la poca comunicación existente entre estos egresados, la calidad del afecto aun los mantiene unidos, resaltando en sus palabras que uno de los motivos principales que los llevo a convocar esta reunión fue el poder expresar su gratitud, a Dios y a la Universidad de Los Andes por todo lo aprendido dentro de sus aulas.

En representación de los Padrinos, dirigió las palabras el Doctor Desiderio Rincón Pacheco, quien muy emocionado recordó cuando en este mismo recinto, celebró en el 2011, los 50 años de la Promoción Doctor Francisco Moncada Revés, ULA,1961, de la cual formó parte.

En esta oportunidad también recordó, que ellos fueron escogidos como los tres padrinos de la Promoción “Honor a Mis Padres” de manera democrática, por esa muchachada que concluía sus estudios de pregrado en las mismas aulas y centros asistenciales, de donde provenían sus Padrinos de Promoción, dijo que tanto el   Doctor, Marín, como su persona, se sintieron muy afortunados por haber sido escogidos como sus Padrinos y mucho más, al saber que les acompañaría como otro de los Padrinos electos, el Rector de Rectores Doctor Pedro Rincón Gutiérrez, a quien catalogó como el artífice de la Moderna Universidad, ya que llevó en ese entonces a la ULA, de cinco Facultades, a nueve Facultades.

Promoción de Médicos Cirujanos celebraron sus XX años de egresados.(Foto: Ramón Pico)

Manifestó que “esto que he mencionado es una pequeña parte de su gran obra conocida y reconocida por propios y extraños y que debe servir de ejemplo para los que hemos tenido el privilegio de recibir educación en instituciones universitarias y sobre todo autónomas, porque sin autonomía la universidad es cualquier cosa menos universidad”. Finalmente el Doctor Desiderio Rincón Pacheco culminó sus palabras pidiendo un minuto, no de silencio, si no, un minuto de aplausos para el Co-Padrino de esta Promoción, a quien se le conociera cariñosamente como “Perucho”.

Para la Doctora Rosenzweig Levy, fue un momento muy especial ya que, quienes tomaron la palabra en esta oportunidad, destacaron y resaltaron la obra y la memoria del Ilustre Rector de Rectores, Doctor Pedro Rincón Gutiérrez, quien invocaba siempre el respeto ,el diálogo, la paz y la unión entre los universitarios, agradeció a estos ulandinos por haber retornado a la casa que los formó y a la cual deben considerar como su hogar académico, donde siempre se les estará esperando con los brazos abiertos, para que se sigan formando, o para que desde ya comiencen a preparar una celebración similar que pudiera corresponder a sus venideros 25 años de graduados. (Jorge Lacruz Maldonado CNP. 14.695)