La invasión a terrenos de la Universidad de Los Andes (ULA), estaba anunciada y planificada. Al menos así lo expresaron los profesores Luís Loaiza y Francisco Brito, docentes universitarios preocupados por el rumbo que ha tomado el ataque de  algunos personeros del gobierno revolucionario contra la universidad libre, popular, democrática y autónoma.

De los recientes hechos donde unas 500 personas, se apropiaron de manera violenta de una extensión de tierra, propiedad de la ULA, no hay la menor duda para la opinión pública de que fueron impulsadas por el efecto mediático del Gobernador Marcos Díaz Orellana, y del presidente del Consejo Legislativo del estado Mérida, Alexis Ramírez.

El profesor Luís Loaiza,  expresó que el gobernador es un ignorante de la historia de la Universidad de Los Andes, pues desconoce que ha sido esta casa de estudios, la que ha propiciado el crecimiento de la ciudad, en base a sus necesidades apremiantes.

“Es lamentable como desde el gobierno regional, se ignora olímpicamente la historia de la Universidad de Los Andes, y se ignora el rol que ha desempeñado la universidad el desarrollo urbanístico de Mérida. Llamar a la universidad terrateniente y estimular las invasiones a terrenos universitarios, es desconocer la contribución que esta casa de estudios ha hecho para la construcción de grandes obras como el Hospital Universitario de los Andes y asentamientos urbanos de vieja data. Hay que sumar a esta contribución, la expansión de la ULA en grandes edificaciones como los modernos núcleos de La Hechicera y de La Liria, entre otros”

Dijo que es vergonzoso que desde el gobierno, por un afán populista e irresponsable se atente contra la universidad, que más bien espera que los gobernantes, egresados de esta universidad contribuyan con ella.

“Por muchos años, este gobernador tendrá que darle explicaciones a la historia, pues este bochornoso hecho quedará en la memoria de los merideños. Marcos Díaz será visto como el gobernador que siendo medico atentó contra los espacio donde la ULA tiene proyectado el Campus Biomédico y la Facultad de Odontología, obras de alto impacto benéfico para los merideños y los venezolanos”

El Converso

Nuevamente la universidad ha sido atacada por la barbarie y de manera primitiva. Así lo aseveró el profesor Francisco Brito, quien destacó el gran efecto social que tiene previsto la construcción de Campus Biomédico, cuyos terrenos fueron invadidos.

“Lo maléfico es que, sin duda,  fue es una acción coordinada en la que intervino el Consejo Legislativo de estado Mérida y el gobernador del estado. Ese gobernador tiene la actitud del converso, pues siendo originario de las filas copeyanas, está obligado a demostrar que es más chavista que cualquier otro. Esto lo lleva a impulsar acciones que van mas allá de lo que su fuero interno pueda dictarle. Decir que la universidad es terrateniente es simplemente una locura, cuando se ha demostrado hasta la saciedad, que la institución ha donado terrenos para favorecer a toda la ciudadanía”

Brito dice que el gobernador se volvió a equivocar,  pues en los recientes hechos de violencia, en los cuales los vecinos protestaron los  continuos apagones y de donde infelizmente resultaron muertos dos jóvenes, el gobernador no fue capaz de detener esta fatalidad ni a los grupos armados.

Ahora  -dijo- se suscita otro grave error de su parte con esta invasión planificada a terrenos de la universidad. El gobernador quiso vender la idea  de que son terrenos baldíos, cuando en realidad están protegidos por la propia Constitución Bolivariana de la Republica de Venezuela, al ser catalogados como terrenos destinados a proyectos de carácter educativo.

“El gobernador, además de violar la leyes,  quiso atacar a la cabeza pensante de un país como lo es la universidad.  Esto fue una nueva avanzada pésimamente calculada por Marcos Díaz Orellana. Un gobernador que hace poco,  salió muy mal parado en el previo ataque que le perpetró a la universidad, al amparar la violencia armada, los saqueos, la destrucción y otros hechos tan aborrecidos por  los merideños” finalizó Brito.