"En un tiempo atrás" allá por los años 80, Venezuela fue ambiente propicio para estrenar y probar tecnología móvil y las bondades de internet. En medio de esta realidad de aquel entonces, Mérida fue pionera desde la Universidad de Los Andes, junto a otro reducido grupo de universidades públicas importantes. De hecho,  la ciudad de Mérida tuvo la mayor cantidad de cibercafé para sus ciudadanos y una preponderante población estudiantil y profesional.

Las décadas siguientes atravesaron cambios drásticos y no precisamente para seguir creciendo como país tecnológicamente conectado.

Pero, ¿Qué ocurre con las telecomunicaciones hoy día en Venezuela? La actividad  sobre el Bloqueo en Internet desarrollada por el Instituto Prensa y Sociedad (Ipys), durante este miércoles 30 y jueves 31 de octubre de 2019 en la ciudad de Mérida, tuvo como cierre un conversatorio abierto, de la mano de Alejandra Stolk, como especialista de la Dirección de Telecomunicaciones y Servicios de la ULA (Dtes).

“Décadas atras, muchas empresas de tecnología y telecomunicaciones querían que nosotros los universitarios fueramos los primeros en conocer de los equipos novedosos y sus avances, y así ellos podían medir eficacia y resultados. Fuimos privilegiados en ese gran laboratorio para desarrollar conocimiento en materia de telecomunicaciones” refirió Stolk.

De hecho, el profesor ulandino, Ermanno Pietrosemoli  en 2007  logró instalar una serie de antenas a lo largo de la trasandina merideña para demostrar que se podía llevar internet a los pueblos apartados. Fue el enlace inalámbrico de mayor kilometraje en el mundo, lo que le permitió instaurar un récord Guinness, además, estuvo junto a otros entes, al frente del auspicio de la Escuela Latinoamericana de Redes (Eslared), entre otras tantas labores en favor de la expansión del conocimiento sobre telecomunicaciones. Su trayectoria le permitió en el  2017 logró ingresa al Hall de la fama de internet.

De este panorama que fue promisorio, hoy queda oscuridad, desconexión y bloqueos a contenidos, portales informativos y otros sitios web en internet, como parte de la respuesta a la pregunta precitada. Una serie de intervenciones del actual régimen en política de telecomunicaciones contra informaciones y actividades no consonas con su doctrina, solo generó el deterioro de la estructura tecnológica en el país, lo que hizo predictivo y revelador el actual blackout que afrontamos a diario. 

¿Por qué desmejoró internet en Vzla?

A la par de políticas restrictivas, se profundizó el hurto generalizado de la infraestructura y cableado, el cual levanta toda sospecha y suspicacia por el modus operandi de estos delincuentes “profesionales”.

Si bien antes, la adquisición de nuevos equipos no resultaba nada engorroso, hoy día afrontar una realidad de negocios se hace absolutamente complejo por los costos, junto a la escasa oferta. Hay control de precios y rigurosidad en la negociación para introducir nuevos servicios. Este exceso de controles ha generado desorden e informalidad en el sector.

En la siguiente Línea del Tiempo construida por Urribarrí y Díaz (2018) se aprecia que internet en Venezuela se ha ralentizado de manera dramática.

¿Las telecomunicaciones hoy?

El pasado año (2018) se llegó a bloquear la navegación anónima conocida  como TOR. ¿Por qué?   Simple, TOR era el túnel de acceso en Venezuela a la información y eventos no compatibles con la ideología oficialista que se publica por distintos sitios web. A principios del 2019 el régimen creó la Corporación Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela, sin que hasta la fecha se sepa de objetivos logrados y funcionalidad. Al cierre del presente año, se ha datado y documentado por distintas organizaciones no gubernamentales, la intensificación de nuevas formas y esquemas de bloqueo y censura en la navegación con sentidos temporales y localizados. Desde la Dtes de la ULA se ha generado colaboración con estos organismos para entender lo que acontece con los derechos al acceso a Internet en Venezuela.

Desde el servicio ABA perteneciente al Estado se detectan bloqueos temporales, repetitivos (Youtube, Periscope, Intagram) con sus efectos colaterales. Se aprecia la sincronización de bloqueos especialmente cuando hay actividad parlamentaria en la Asamblea Nacional y algún pronunciamiento de funcionarios del gobierno norteamericano.

¿Qué esperamos?

Ha de llegar el momento propicio, es decir, tras salir de la actual crisis económica y política, en el que podamos sentir una franca y rápida mejoría del sector, dijo Stolk.

“Se requiere aparte de una gran inversión en el sector del servicio eléctrico, inversión y seguridad para esas empresas que están a la espera del debido respeto a sus bienes, así como la seguridad plena para dichas instalaciones. En medio de estas expectativas y otras tantas complejas desde el punto de vista laboral, se aspira el restablecimiento del apoyo a las universidades e institutos de investigación para retomar el fomento y desarrollo de las telecomunicaciones en el país. En pocas palabras, garantizar el derecho humano de acceder a una internet de gran velocidad.