Ex vicerrectores analizaron crecimiento del NURR
***Interesante interacción durante el conversatorio.
El crecimiento y efectividad durante 40 años del Núcleo Universitario “Rafael Rangel” fue analizado por ex vicerrectores, durante un conversatorio realizado como parte de las actividades aniversarias, el pasado lunes 25 de junio.
A la cita, efectuada por el actual vicerrector-decano del NURR, Eric Brown, asistieron los profesores Ramón Pachano (1990-1993), Juan Carlos Delgado (1993-1996, 1996-1999), Conrado Daboín (1999-2002) y Gladys Gutiérrez (2002-2005, 2005-2008), quienes compartieron parte de su experiencia como autoridades y reflexionaron en torno a las fortalezas, incluso las debilidades del Núcleo Trujillo de la Universidad de Los Andes.
La apertura estuvo a cargo del doctor Brown, quien luego de dar la bienvenida expuso la importancia de este encuentro, en el cual se esperaba la participación de los presentes como una manera de enriquecer el conversatorio.
Seguidamente el ex vicerrector Ramón Pachano desarrolló su exposición, expresando la satisfacción que para él representa el haber sido un factor determinante en la continuidad de este proyecto que, en algún momento, algunos plantearon la posibilidad de convertirlo en la Universidad de Trujillo, porque “prefiero recibir maltrato de Mérida que recibir el beneplácito del Gobierno Central”, dijo.
Una vez más definió al Núcleo en dos palabras claves: desarrollo y frustración. “El NURR no ha satisfecho las aspiraciones del pueblo trujillano porque no damos suficientes cupo ni ofrecemos todas las carreras que nos pide el pueblo porque no nos dan recursos para crecer”. Sin embargo, “crecemos y somos el factor determinante de matrícula de la Universidad de Los Andes, además de altas posiciones en lo académico, pero al momento de distribuir el presupuesto somos la Cenicienta”.
Seguidamente el profesor Juan Carlos Delgado, tomó la palabra y habló sobre esos primeros pasos, refirió asimismo cómo fue creciendo el NURR hasta desarrollarse y propuso retomar la discusión en torno a la consolidación del sentido de la institución como una universidad regional.
“La gran fortaleza que ha tenido el Núcleo Universitario es haber sido parte de una universidad autónoma. Nos sentimos orgullosos de esta universidad autónoma que ha tenido un proceso de libertad de pensamiento, nos desarrollamos y emprendemos actividades”.
Por su parte el profesor Conrado Daboín basó su intervención en el sentimiento fundamental que recoge un hecho histórico de 1918 como lo fue la Reforma de Córdoba, que trata a la educación como un acto de amor.
“Pienso que todo lo que pueda hacerse en el Núcleo Universitario “Rafael Rangel, de la Universidad de los Andes va a tener frutos si nos basamos en ese sentimiento. Y esa es la gran convocatoria, debemos convertirnos en portavoces de amor para que la universidad pueda transformarse y corresponderse más aún con las exigencias de esta comunidad trujillana”.
Igualmente la profesora Gladys Gutiérrez reflexionó, no sólo sobre algunos aspectos relacionados con la fundación, sino a algunos momentos difíciles que le correspondió vivir, como por ejemplo la muerte de dos estudiantes, pero también habló de aquello que se constituyen en la gran satisfacción, la alegría y orgullo de los padres como lo es el ver a sus hijos recibiendo sus títulos como profesionales.
“No somos un Núcleo ni una universidad inconclusa, somos una universidad que tiene actividades docentes, de investigación y extensión y capacidad para elegir a nuestras autoridades y decidir”.
Una vez cerradas las intervenciones de los ex vicerrectores, el doctor Eric Brown, como anfitrión, inició la interacción en la cual se escucharon importantes apreciaciones de los asistentes, los cuales enriquecieron el conversatorio con una diversidad de datos que permitieron tener mayor referencia sobre la historia, crecimiento y desarrollo del Núcleo Universitario “Rafael Rangel”, la Universidad de Los Andes en Trujillo en sus 40 años.
“La idea es que se pueda conformar un grupo de opinión que permita llamar la atención y orientar la vida del Núcleo y compartir proyectos de definición de lo que debe hacer la Universidad de Los Andes en los próximos 50 años".