Resolución del Consejo Universitario sobre Solicitud de Ayuda Humanitaria de la Facultad de Humanidades y Educación

Anexo a la Resolución N° CU-0435/19, del 25.03.2019. Pág. 1/3.

El Consejo Universitario de la Universidad de Los Andes, en uso de las atribuciones legales que le confieren los Artículos 24 y 26 de la Ley de Universidades, emite:

Solicitud de Ayuda Humanitaria ante la situación de Crisis Humanitaria Compleja que atraviesa la comunidad de la Facultad de Humanidades y Educación.

Considerando

•Los acuerdos de la Asamblea de la Facultad de Humanidades y Educación, de fecha 04.10.2018, que declaran la Emergencia Humanitaria Compleja de la comunidad que hace vida en esa Facultad y, en consecuencia, manifiestan el carácter urgente de buscar y establecer los mecanismos para lograr la Ayuda Humanitaria que se requiere y ejercer la solidaridad como principio de apoyo, con el firme propósito de mantener la Universidad de Los Andes abierta.

•Que las difíciles y dolorosas circunstancias que fueron origen de tales declaraciones y acuerdos, más acrecentadas aun en la actualidad, han afectado psíquica, física y espiritualmente a la mayor parte de los miembros de esa comunidad, activos y jubilados, quienes, privados de los derechos humanos primordiales, no pueden cubrir los gastos fundamentales de sobrevivencia, debido a la desproporción entre las necesidades alimentarias, de salud, educación, transporte y vestimenta, y el ingreso devengado del salario de cada trabajador universitario, el cual es totalmente insuficiente pues no representa más que un insignificante porcentaje de lo necesario para cubrir los gastos de una vida digna para él y su familia.

•Que es público y notorio, ante toda la comunidad, el deterioro físico y la pérdida de peso de buena parte de las personas que hacen vida en esa Facultad; y que las deficiencias y padecimientos físicos, derivados de la malnutrición y de la suspensión obligada de tratamientos médicos son consecuencias, tanto de la falta de recursos económicos para comprar los alimentos y medicamentos necesarios, como de la escasez de productos alimentarios e insumos médicos a nivel nacional.

•Que el personal de esa Facultad presenta, frecuentemente, solicitudes de permisos por causa de salud, lo cual refleja sus efectos en el ejercicio de sus labores académicas, administrativas, técnicas y de obreros. Algunos indicadores del debilitamiento de la calidad en el trabajo por causa de enfermedad, son: disminución de la atención, desmayos, problemas de tensión arterial, depresión, pérdida considerable de peso, mengua de la masa muscular, trastornos digestivos, entre otros.

•Que los padecimientos y necesidades antes señalados deterioran la vida de todo el núcleo familiar, con especial énfasis en los niños, niñas y adolescentes, quienes muestran evidentes rastros de desnutrición, deterioro en el crecimiento y en el desarrollo bio-psico-social, y debilidades cognitivas, resultado de la deficiente nutrición y falta de acceso a los más mínimos requerimientos nutricionales esenciales para el ser humano, incluso desde el proceso de su gestación, todo lo que evidencia una reiterada violación a los derechos fundamentales de la niñez.

•La manifestación y difusión en redes sociales de las situaciones individuales y colectivas que solicitan la atención solidaria y el compromiso de una comunidad universitaria unida ante todo en el propósito de la vida, para alcanzar juntos los fines de servir a toda la población nacional en sus intereses educativos.

•El marcado deterioro de los espacios comunes en sus instalaciones por causa de la insuficiencia presupuestaria para su mantenimiento, sumado a la inexistencia de las mínimas condiciones de seguridad para el ejercicio de las actividades académicas, administrativas y obreras, las cuales se ven cada día más comprometidas ante la desatención por parte de los organismos a quienes compete la seguridad ciudadana.

•La falta de garantías para el normal funcionamiento del transporte público, así como la escasez de combustible que dificulta la asistencia a los puestos de trabajo de los miembros de esa Facultad.

•Que las causas enunciadas han incidido en la desactualización de las bibliotecas y en la posibilidad de acceder a bases de datos de carácter académico y, por ende, en el ejercicio de la docencia, la generación de resultados y la difusión de los aportes científicos y humanístico, así como en las actividades de extensión, a pesar de la alta calificación y productividad de su comunidad académica que, pese a la desventaja que supone la grave crisis que atraviesa, es pionera en gestión de conocimiento y desarrollos, tal como lo demuestran las evaluaciones latinoamericanas y del mundo de sus programas curriculares y las mediciones de sus resultados en investigación.

•Que, el sometimiento a vivir en tales circunstancias, constituye una violación de los Derechos Civiles y Políticos previstos y consagrados en el articulado de los principales Tratados, Pactos y Convenciones Internacionales garantes de los Derechos Humanos fundamentales suscritos por Venezuela, y que el goce efectivo de esos derechos requiere, como mínimo, que todos disfruten de los derechos de subsistencia, que consagran fundamentalmente el derecho a la alimentación y nutrición adecuadas, vestido, vivienda, así como a las condiciones de atención necesarias. Tal como ha sido previsto en los artículos 22, 23 y 25 de la Declaración de los Derechos Humanos (1948); en los artículos 11 y 14 de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, aprobada en 1948; en los artículos 11 y 12 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 1966; en el artículo 27 de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño y de la Niña, de 1990, entre otros.

•Que, a pesar de las dificultades que nos impone la Crisis Humanitaria, los miembros de la planta docente y el personal administrativo, técnico y obrero manifiestan  la conciencia de la importancia del rol social que desempeñan como sujetos históricos y decidieron, mantenerse en sus puestos de labor y defender el derecho a la enseñanza, pues solo mediante la educación en todas las áreas de conocimiento podrán proporcionar a esta Venezuela y a sus generaciones futuras la posibilidad de convivir en democracia, igualdad, tolerancia, prosperidad y respeto por el otro.

Dado, firmado y sellado en el Salón de Sesiones del Consejo de la Facultad, a los 19 días del mes de febrero de 2019.

Dado, firmado y sellado, en el salón de sesiones del Consejo Universitario de la Universidad de Los Andes, en la ciudad de Mérida, a los veinticinco días del mes de marzo del año dos mil diecinueve.

   Mario Bonucci Rossini                                           Justo Miguel Bonomie Medina

Rector de la Universidad                                          Secretario (E) de la Universidad

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