Marchar y activar Puntos de Libertad decidió asamblea de ulandinos

Durante 2 horas estudiantes, profesores, empleados y obreros  de la Universidad de Los Andes, escucharon los planteamientos e ideas de más de 20 participantes, quienes expusieron las carencias de cada factor, dependencia, o de la universidad en general, por la situación de crisis que padece el país pero que también sufre cada uno como venezolano y ser humano.

Los asistentes a la asamblea concluyeron que realmente la Universidad de Los Andes vive prácticamente un cierre técnico frente a la fuerte crisis que enfrentan sus trabajadores y estudiantes

Muchas fueron las propuestas esbozadas, entre las que destacan: la organización de una gran marcha para los próximos días, en la que no sólo se involucre a los universitarios sino que cuente con la participación de los diferentes factores de la sociedad civil merideña. Igualmente se propuso la activación de Puntos de Libertad y la la realización de una vigilia permanente y sin retorno, pero diurna, en los espacios de la plaza Bolívar de la ciudad de Mérida, las cuales comenzarán unos días antes de las elecciones del 20 de mayo. En esa vigilia, los profesores de la universidad ofrecerán sus clases y cada profesional también podrá ejecutar sus labores diarias, en vista de que dentro de las instalaciones universitarias ya no se cuentan con las herramientas necesarias para realizar su trabajo.

En los próximos días la dirigencia gremial dará a conocer las acciones a seguir a partir de lo acordado en la asamblea.

Igualmente se propuso nombrar un equipo de expertos en leyes que se encarguen de elaborar un documento que contenga los aspectos legales relacionados con las condiciones en que los universitarios están laborando en sus dependencias, los estudiantes están recibiendo sus clases, así como las deficiencias, carencias y necesidades de muchos universitarios o estudiantes quienes en muchas oportunidades asisten a laborar o a sus clases sin haber siquiera desayunado o sin dinero para el almuerzo o para pagar un pasaje, lo cual constituye una violación a sus derechos humanos por parte del Estado, al cual le corresponde garantizar los derechos de cada trabajador y estudiante universitario.


Así mismo se acordó proponer al Consejo Universitario que evalúe la situación de cierre técnico que enfrenta la universidad en todas sus dependencias. Finalmente se decidió que la dirigencia gremial se encargue de organizar y planificar la gran marcha, vigilia y demás actividades que deberán de continuarse como una forma de elevar su voz de protesta ante la situación de crisis que vive la universidad y el país en general. María de los Ángeles Pérez. 9795. Prensa ULA. Fotos: Ramón Pico