Existen dos discursos en la obra del doctor Briceño Guerrero: el académico y el de las artes
“El dueño de la lengua es el artista de la palabra, es el poeta. En él está escondida la forma, la estructura, la cadencia, el ritmo, la musicalidad de un lenguaje de antiguas palabras de otros poetas. Ese don no es otro que el de saber poner en armonía los elementos dejados al azar en el universo. Eso que Heráclito decía en el célebre fragmento:…el más bello cosmos está hecho de cosas derramadas al azar”.
José Gregorio Vásquez
Durante el ciclo de conferencias dictadas en la ULA Táchira para hacer homenaje póstumo al filósofo, escritor, poeta, lingüista y docente de la ULA, José Manuel Briceño Guerrero, el profesor José Gregorio Vásquez, también docente y poeta de la Escuela de Letras de la ULA, en Mérida, dictó una ponencia titulada “La casa de los dioses de J.M. Briceño Guerrero”, en la cual buscó desentrañar los distintos discursos presentes en la obra académica y literaria del insigne docente y maestro, y durante la cual expresó que “nada hay de curioso ni ajeno ni mucho menos misterioso” en que el último libro que publicara antes de morir Jonuel Brigue, como también se le conoció a JMBG en su obra literaria, fuera un libro de poemas, “donde la palabra ya hecha música volviera al papel, llevando consigo toda la magia de una tradición que nace con el tiempo en el oído sonoro del lenguaje”.
Durante su exposición, el docente de la Escuela de Letras utilizó la alegoría del título de una de las obras de JMBG, para explicar que la propia obra de este autor de múltiples textos académicos, literarios, filosóficos y poéticos, a lo largo de su vida ”es una anfisbena”, es decir, una culebra de dos cabezas, porque en ésta existen “dos líneas, dos ejes, dos horizontes”, los cuales serían “la obra de pensamiento” en la cual reposaron sus textos académicos “que se hicieron libros con el tiempo”, y el otro eje, el de la escritura literaria –que JMBG firmaba como Jonuel Brigue-, en la que predomina el discurso del arte.
El profesor Vásquez durante su exposición utilizó tres videos para dar a conocer el método de enseñanza del doctor Briceño, así como las contradicciones o complejidades de la cultura latinoamericanay las distintas expresiones de la cultura presentes en el sentir popular latinoamericano. Uno de los videos tenía el sugestivo título “Una noche con Jonuel Brigue”.
Respecto al método de enseñanza del filósofo de la ULA, el primer video mostraba al propio maestro enseñando a los estudiantes y su capacidad de transmitir de manera sencilla ideas profundas de la cultura a través de la lectura de libros clásicos. Recordó que cada viernes el profesor Briceño hacía lectura de obras clásicas en su Departamento de Filosofía, en Los Caciques, Mérida, oportunidad en la que leía con muchos jóvenes y visitantes permanentes, obras esenciales para comprender, comentar, dialogar con la obra o con sus autores sobre temas universales, “leer para compartir la pasión por un autor o una obra. El encanto del lenguaje. El mundo a partir de las otras culturas y sus lenguajes”.