Vicerrector del Táchira: la ULA confronta la situación más difícil desde su fundación

El Consejo de Núcleo se celebró en la Sala de Usos Múltiples, panel de autoridades y consejeros (Foto: Marlene Otero S.)

Durante un Consejo de Núcleo Ampliado, celebrado en la mañana de este miércoles 18 de mayo en la ULA Táchira, el vicerrector, profesor Alfonso Sánchez, manifestó  “creo que estos son los tiempos más difíciles que ha confrontado la Universidad de Los Andes en sus 231 años desde su fundación”.

Al mismo tiempo dijo que “se equivocan quienes creen que les vamos a entregar la universidad  al cercenar los derechos de los universitarios que nos impiden tener un salario digno porque cada quien, desde sus espacios y desde sus trincheras, asumiremos nuestro compromiso en defensa de la universidad”.

Estas palabras fueron expresadas por el profesor Alfonso Sánchez durante un Consejo de Núcleo ampliado que fue convocado, de manera exclusiva, para analizar la situación financiera actual de la universidad, al respecto dijo que desde el año 2007 comenzó el recorte financiero y posteriormente se efectuaron cambios en los procedimientos para la asignación de los recursos, de manera de ir “estrangulando y asfixiando a las universidades autónomas”, por parte del Ejecutivo nacional.

El docente argumentó que en el año 2007, cuando habrían comenzado los recortes, el Ejecutivo  afirmaba que la razón eran los bajos precios del petróleo, muy a pesar de que para ese entonces el precio del barril alcanzaba los 73 dólares y actualmente se argumenta que el recorte es debido a una “una guerra económica”, razones que la autoridad de la ULA rechaza como válidas porque, en su criterio, “se trata de ejercer un acoso a las universidades”.

El vicerrector añadió que “este año no nos han dado sino el equivalente a 4 meses o al 29,61 por ciento del presupuesto que requiere la universidad para cubrir sus necesidades” y este solo alcanza para pagar salarios en un 90%,  pero no hay recursos para el mantenimiento de las infraestructuras, los laboratorios, impulsar la investigación, para la reposición de cargos de los jubilados ni otros gastos de funcionamiento, con lo cual “parece que fuéramos una empresa empleadora ya que el dinero solo alcanza para pagar salarios”.

Del presupuesto asignado a toda la ULA, al Núcleo apenas le corresponde un monto de 1.617.664 bolívares para atender durante todo un año el funcionamiento de 9 carreras, tres especializaciones, un doctorado y varias maestrías.

Parte del público presente en la sesión ampliada del Consejo de Núcleo, constituido por miembros de los distintos gremios universitarios  (Foto: Marlene Otero S.)

La situación de los universitarios

Respecto a la situación de los docentes y trabajadores universitarios, afirmó que un docente titular, quien es el que recibe la mayor remuneración de todos los universitarios, en 2015 apenas ganaba 36.812 bolívares,  mientras que la cesta básica arribaba a  139.273 bolívares, con una inflación del 270%  y en la actualidad se mantienen los mismos salarios, a pesar de una inflación acumulada del 169,8% y un costo de la cesta básica de 203.943 bolívares mensuales, con lo cual, “los universitarios son los profesionales peor pagados del país y los docentes universitarios son los peor remunerados de América Latina”.

Respecto a cómo estaría afectando a los estudiantes esta situación, el profesor Sánchez manifestó que la situación que confronta la universidad ha llevado a una preocupante deserción estudiantil, así como de su personal docente, administrativo y obrero que ha hecho que incluso queden vacantes las plazas o concursos para contratación de nuevo personal.

De igual modo, la autoridad universitaria cuestionó que en su política de “intervención de las universidades”, el gobierno le ha quitado la potestad que antes tenían éstas de participar en la convocatoria e ingreso de alumnos por la vía de la prueba interna, con lo cual se habrían perjudicado los propios bachilleres aspirantes.

Al final de su intervención, el profesor Sánchez, además de lo expuesto, afirmó que con estas políticas de “acoso financiero” a las universidades autónomas se busca “cercenar la autonomía académica y financiera de las universidades, así como ir hacia una sola direccionalidad y control” por parte del gobierno de las universidades autónomas,  asimismo, apuntó que la “maqueta” o planillas que deben entregarse mensualmente para fundamentar el gasto universitario “es un instrumento de control académico y administrativo para justificar su inoperancia, al igual que lo constituyó el decreto 6649 y la Resolución 501 del CNU”.

Otras intervenciones

Durante su intervención, el coordinador administrativo de la ULA Táchira, profesor Omar Pérez Díaz, expresó que lo importante es mantener la unidad de los universitarios sin ningún tipo de ambiciones ni protagonismos, al tiempo de requerir de los universitarios que se identifiquen y desarrollen un “sentir por la universidad” trabajando en distintas actividades para su recuperación y ejerciendo el cargo que a cada quien le corresponda con un sentido de “empatía” y querencia hacia la institución.

El profesor Adrián Contreras, coordinador académico de la ULA Táchira, cuestionó que ya los universitarios no pueden acceder a becas o estudios para crecer académicamente, sino atender exclusivamente a las áreas que determina el Ejecutivo nacional, políticas que no estarían tomando en cuenta las propias demandas institucionales de las universidades ni los órdenes de crecimiento personal o profesional de acuerdo con su vocación a la que antes atendían estas solicitudes, al tiempo de afirmar que “hay muchas personas preparadas aquí para luchar por la universidad y ésta, la universidad, no la vamos a entregar”.

Demandas estudiantiles

 

Durante el ciclo de intervenciones también hubo participación estudiantil, cuyos representantes mencionaron la situación que confrontan los alumnos quienes también padecen el alto costo de la vida, los bajos montos de las becas, la inexistencia de transporte, la baja calidad de la bandeja de alimentos en los comedores de Mérida y Trujillo, la necesidad de realizar la actualización de la carnetización estudiantil y hablaron de seguir luchando “con la universidad abierta” al tiempo de llamar a la unidad de todos los universitarios.