Las intenciones del manejo del cien por ciento del sistema de ingreso de bachilleres  a las universidades del país, por parte del gobierno, mantiene una situación de alta preocupación en el sector,  según apreciación del profesor José María Andérez, Secretario de la Universidad  de Los Andes.  La autoridad ulandina cree,  que existen situaciones más relevantes que atender en este ámbito, antes que  multiplicar las matriculas en las casas de estudios.

“Nosotros seguimos insistiendo  en que la forma que propone el gobierno para ingresar a la Universidad de Los Andes,  no resuelve los problemas de equidad, ni los problemas de deficiencia de calidad que hay en el subsistema de educación media y diversificada”.

Andérez destacó  que la Prueba de Admisión  es una medición de los conocimientos mínimos y necesarios que debe tener un estudiante. No solamente para ser admitido dentro de una universidad, sino que también debe estar capacitado para la prosecución y el egreso exitoso.

“El gobierno se equivoca de norte a sur en su apreciación de admisión de estos jóvenes. Si yo ingreso  un estudiante a la Universidad de Los Andes, y no tengo un aula adecuada, no tengo los profesores suficientes, no tengo becas para los bachilleres, un buen comedor universitario, un buen sistema de salud y la posibilidad e adquirir libros para las bibliotecas, simplemente este estudiante no va a avanzar, se rendiría en el camino y se iría”

Otro atenuante, es  que al ingresar bachilleres que tienen una inadecuada preparación, serían objeto de aplazamiento en las materias que curse. Además estas casas de estudios tienen un régimen de permanencia, con lo cual el estudiante se desestimula y el grado de deserción sería enorme.

La propuesta práctica ante la masificación en las aulas universitarias, debería apuntar hacia todos aquellos institutos de educación superior que ha creado el actual gobierno y sobre los cuales tiene el control total. Andérez considera que la admisión del cien por ciento se debería aplicar en dichos centros de estudios, empezando por la Universidad Bolivariana que, de acuerdo a recientes índices, posee el más alto porcentaje de deserción de las universidades del país.

“De nada nos sirve, admitir 5 mil o 10 mil estudiantes más, cuando a más tardar en el segundo semestre se van a estar retirando”.

Ante los reiterados anuncios del Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior, de manejar el 100 por ciento del ingreso estudiantil, desde la ULA se propone y de hecho se adelanta, una exhaustiva evaluación de la prueba de admisión, para su depuración.  
El Secretario José María Andérez,  plantea también,  analizar el ámbito de la educación media donde es obvio que persiste un problema grave en la calidad de la formación de los muchachos. Por ultimo ratificó que la Universidad de Los Andes ha dado pruebas de justicia, transparencia y equidad, con el crecimiento de su matricula estudiantil en una proporción del 35 por ciento en los últimos tres años.

Núcleos de Secretarios

En los Núcleos de Secretarios universitarios (que se reúne una vez cada tres o cuatro meses), se debate con bastante fuerza el problema de la Admisión.  La Comisión de este núcleo tiene reuniones periódicas para tratar el asunto, donde también participa gente de la Oficina del Planificación del Sector Universitario.
“Es a través de la Opsu, que le hacemos llegar al Gobierno Nacional las aspiraciones de que el nuevo sistema de ingreso cubra las expectativas de equidad, pero dichas propuesta no has recibido aprobación”

Tanto la Universidad Simón Bolívar como la Universidad de Los Andes,  han asumido un estudio serio, en el cual se está analizando el proceso que llevan los estudiantes que acaban de culminar los inscritos por vía Opsu donde que descartó la prueba de admisión.

“Antes de decir que el nuevo sistema de ingreso vía Opsu es bueno y que cubre todas las presuntas ineficiencias, inequidad y desigualdad que se le atañen al sistema anterior, es importante observar lo que está pasando con los estudiante que ingresaron por dicha ruta”

En la última reunión del Núcleo de Secretarios, el representante de la Universidad Simón Bolívar, profesor  Alejandro Teruel, presentó un estudio donde se evidenció que dicho sistema no resolvía la inequidad, sino que generaba problemas adicionales.
Por ejemplo en las áreas técnicas, que contempla las matemáticas, física y química,  el rendimiento de las personas que habían ingresado por la vía Opsu, era en el mejor de los casos, la mitad o un tercio respecto al rendimiento de los estudiantes que había ingresado por otra vías.

“Otro caso percibido en la sede que la Simón Bolívar tiene en el Litoral, es que se comprobó que en el área de matemática,  el rendimiento de estos jóvenes era cinco o diez veces menor  que el rendimiento de los muchachos que ingresaban por la Prueba de Admisión o a través de un curso introductorio que esta institución tiene”

Andérez, aseveró que si esta realidad se mantiene en el tiempo –pese a que se ha evaluado solo un semestre- pues se estaría demostrando que la admisión no es el problema. El problema estaría en la preparación de los futuros bachilleres y su prosecución en la universidad, con lo que le estaríamos haciendo un flaco servicio al país con unas universidades atiborradas de gente que no tiene la preparación, ni la habilidad suficiente que, en el caso explicito no es culpa de estos jóvenes.

“No hay que hacer recaer la ineficiencia del proceso de la educación secundaria en los hombros de los estudiantes que aspiran entrar a la universidad”

Cuando se asuma un estudio profundo del alcance de la educación media, se eleve el nivel de preparación y se despoliticen los liceos y los contenidos curriculares, se podrá ver luz a la respecto de la masificación en la aulas universitarias.  Lo cierto es que actualmente  se ha detectado que los jóvenes provenientes de liceos públicos y privados ostentan un rendimiento cada vez menor.(CNP:5982)