Biocontacto incumple su convenio con el Jardín Botánico
La situación presentada con la empresa Biocontacto y el no cumplimiento de lo reglamentado en el convenio con la Fundación Jardín Botánico fue expuesta este lunes 18 de julio de 2022, ante el pleno del Consejo Universitario (CU) de la Universidad de Los Andes (ULA)
La Fundación Jardín Botánico ha realizado alianzas estratégicas con algunas instituciones, tanto públicas como privadas, entre ellas con la empresa Biocontacto que ofrece la experiencia de cercanía con una variedad de especies animales.
El profesor de la Escuela de Geografía de la ULA, Anderson Albarrán, quien además es miembro de la junta directiva de la Fundación, expresa que la empresa privada Biocontacto, ha asunido el desconocimiento de lo establecido en el acta convenio.
De acuerdo con esa acta convenio, los ingresos por ventas del boleto integral deben beneficiar tanto al Jardín Botánico como a la alianza con Biocontacto.
Es decir, la compra de ese boleto integral le permite al visitante disfrutar, tanto de los espacios del Jardín Botánico como también de Biocontacto.
¿Qué hizo Biocontacto?
Pese a que la empresa Biocontacto está instalada en espacios pertenecientes a la ULA a razón del convenio, la misma interpuso una demanda ante un Tribunal Civil sobre el régimen económico que impera, el cual se rige por lo establecido en un acta convenio firmada desde el 2014.
Es así como el Tribunal Civil Mercantil de Tránsito dictó una medida que autoriza a la empresa Biocontacto a obtener los ingresos por taquilla de manera exclusiva, dejando por fuera al Jardín Botánico y desconociendo lo firmado en la alianza.
¿Cuántos boleto hay?
Existe un boleto único que permite sólo visitar los espacios del Jardín Botánico y que corresponde únicamente a esa Fundación, también está el boleto integral que da acceso tanto a las instalaciones de Biocontacto como al Jardín Botánico.
Frente a esta situación el CU decidió pasar la situación al Servicio Jurídico para que emprenda las acciones correspondientes en función de preservar los bienes de la universidad y, en este caso, los intereses del Jardín Botánico de Mérida. /María Pérez. 9795. Prensa ULA.