El Niño también apareció en Venezuela entre los siglos 16 y 19

En 1891, los integrantes de la Sociedad Geográfica de Lima comenzaron a tener información acerca de un fenómeno macroclimático que afecta a todo el globo terrestre. Los pescadores peruanos notaron un cambio en la circulación oceánica, es decir, una corriente cálida que afectaba la pesca y cuya aparición podían identificar desde finales de año hasta inicios del siguiente. Es por eso que este fenómeno, folklóricamente, lo llamaron El Niño, en alusión al Niño Jesús.
En una conferencia denominada El fenómeno de El Niño en la historia de Venezuela, el doctor Marcos Peñaloza, docente de la Facultad de Ciencias de la ULA, indicó que lo identificaron como un fenómeno de una contracorriente que aparece en el Océano Pácifico tropical a la altura del sur de Ecuador, norte de Perú.
“Los pescadores peruanos conocían muy bien su área de pesca y podían detectar un cambio en la circulación oceánica, acostumbrados a ver y a sentir la corriente que sube del polo sur hasta esas latitudes, corriente que se denomina corriente del Humboldt o del Perú. Notaron entonces que en ciertos momentos esa corriente que venía del sur era sustituida por una contracorriente que se generaba en la parte norte, a la altura del sur de Ecuador norte de Perú, que cambiaba de temperatura, una contracorriente cálida que afectaba la pesca de las especies que comúnmente están allí, como la anchoa, que se encuentra en aguas frías”.
Según Peñaloza esa contracorriente traía a los pescadores afectación en el ecosistema, pero también en el ambiente atmosférico y terrestre, pues sentían el efecto de fuertes lluvias que arrasaban con todo y todavía lo hacen, es decir, una zona desértica de Perú, al norte, se convertía en un barrial muy grande debido a los desbordamientos. Se encontraron entonces, por una parte, con la contracorriente cálida que denominaron El Niño y, por la otra, con la aparición de fuertes precipitaciones. “Es allí cuando la Sociedad Geográfica de Lima, a finales del siglo 19, comenzó a sospechar que había una relación entre la contracorriente, el cambio de temperatura del agua del mar y las inundaciones que habían en la parte de la costa”.

El Niño en Venezuela
En el siglo 20 El Niño sigue apareciendo y Venezuela, en particular, se ve afectada por fuertes sequías pero, como lo explica el doctor Marcos Peñaloza, no había una sospecha entre la conexión de estos elementos geográficos con aquello que aparecía en el Océano Pacífico tropical.
“Llegó el año 1925 y allí hubo también una aparición del fenómeno con fuerte incidencia en la economía, ecología y ambiente. Transcurrió el siglo 20 y algunos investigadores comenzaron a darse cuenta de la conexión que había entre esta manifestación oceánica del fenómeno y una manifestación atmosférica en cuanto a la presión que existe a lo largo del Océano Pacífico tropical entre Tahití y una zona de Australia, es decir, había un cambio de presión atmosférico cuando aparecía la corriente de El Niño”.
Fue así como se entendió que hay un acoplamiento entre la oscilación de la presión y la aparición de la corriente y la elevación de la temperatura del mar, por eso hoy en día se conoce como El Niño oscilación sur. “A Venezuela le afecta a través de prolongadas sequías que afectan sobre todo la parte sur que hace límite con la parte norte de Brasil, que es donde la sequía es muy fuerte y afecta entonces el caudal de los ríos de Guayana y fundamentalmente el río Caroní que es el que alimenta la represa de El Guri, es por eso que el nivel del Caroní y la represa se ha correlacionado con la aparición del fenómeno”.
Nuestro entrevistado rastrea las huellas históricas de El Niño en Venezuela a través de documentos y cronologías de los siglos 16 al 19, haciendo un inventario de las fuertes sequías que han aparecido. Se valió de algo importante: no se tenía conocimiento del fenómeno en esas épocas, por tanto, cuando cruza las dos informaciones, se ve claramente que las sequías del siglo 16 al 19 seguramente, con bastante certeza, fueron producidas por “los niños” de aquella época.
“En Venezuela hay un trabajo de una arqueóloga norteamericana ya fallecida llamada Betty Megels, en el que encuentra evidencias arqueológicas que indican que en el sur de Venezuela, hace 1000 años, 1500 años, 700 años e incluso 400 años, El Niño impactó en la zona sur de nuestro país y en la zona de Oriente. En particular, ella estuvo investigando sitios arqueológicos cercanos al delta del Orinoco y una localidad en el estado Sucre en la costa de Venezuela. El Niño impacta mucho en la zona oriental y sur de Venezuela y menos en Los Andes”.
El fenómeno de El Niño que actualmente está en proceso comenzó en el año 2014, cuando las evidencias mostraban que los embalses en el norte de Brasil estaban disminuyendo. En el 2015 no llovió casi nada y se estima su duración hasta el mes de junio del 2016. “Luego entramos en una zona neutra y, según los entendidos en la materia, lo que viene es La Niña, es decir, lluvias a granel”.
Esta conferencia fue dictada en el Centro Ambulatorio Médico Integral de la ULA, Camiula, bajo la organización de la Comisión Universitaria de Asuntos Ambientales, Cuaa -coordinada por la doctora Nancy de Sardi- y de la Comisión de Ambiente del Camiula, a cargo de la doctora Yuraima Espinoza.