Julieta Salas de Carbonell: “Dicen que soy escritora, todavía no me lo creo”

La señora Julieta Salas de Carbonell junto a la profesora Nancy Rivas de Prado, directora de Relaciones Interinstitucionales de la ULA. (Fotografía: R. Pico)

** La escritora venezolana, Julieta Salas de Carbonell, durante su reciente visita a la ciudad de Mérida presentó dos de sus más recientes libros, habló de sus profundas raíces con el estado, en primer término por ser descendiente y nieta de Julio Salas y prima de Mariano Picón Salas, en segundo término por la experiencia de haberse  casado con un hijo de Diego Carbonell, ambas familias con fuertes arraigos literarios y académicos con Mérida y la Universidad de Los Andes 

El Grupo de Investigación de las Ideas de América Latina y la Cátedra Libre de Pensamiento Latinoamericano “José Manuel Briceño Guerrero” de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad de Los Andes, reciente recibieron a la señora Julieta Salas de Carbonell, quien vino hasta la ciudad de Mérida a presentar su más reciente publicación “Vívido Sur: historia, crónica, leyenda”, en el que ofrece aspectos relevantes de lo que hacía  y comía su familia en esta ciudad.

El profesor Miguel Ángel Rodríguez Lorenzo, profesor de la Escuela de Historia de la Universidad de Los Andes, señaló que desde ambos grupos de investigación extendieron la invitación a la señora Salas de Carbonell, para que se reencontrara con sus raíces ancestrales, además para que presentara, en el Instituto Municipal de la Cultura de Bailadores, de donde dice se siente oriunda, sus libros “Vívido sur” -que es el más reciente- y “El Misterio de las fuentes”.

“En esta ocasión de reencuentro con sus raíces merideñas nos sentimos complacido de haber recibido a la señora Julieta Salas, quien durante el breve recorrido por la ciudad y los lugares emblemáticos de su familia logró con facilidad identificar dónde vivieron sus ancestros, así como recordó la vinculación de ellos con la ciudad de Mérida y la Universidad de Los Andes”, dijo el profesor Rodríguez.

Agregó que dentro de la Escuela de Historia de la ULA han tenido la oportunidad de reseñar los libros de Salas de Carbonell, por ser una escritora reciente, y quien desde hace  poco tiempo está compartiendo sus experiencias a través de sus libros. “El principal motivo de invitar a la señora Julieta Salas de Carbonell a la ULA, se debe al acompañamiento que se hace desde el Grupo de Investigación sobre Historia de las Ideas en América Latina y la Cátedra Libre de Pensamiento Latinoamericano José Manuel Briceño Guerrero, en la presentación de sus libros en Bailadores y en la Librería La Rama Dorada, ‘Vívido sur’ y El ‘Misterio de las fuentes”.

“Dicen que soy escritora, todavía no me lo creo”

“No represento ninguna institución, pero dicen que soy escritora, todavía no me lo creo, porque en mi familia sí los hay, y todos se encuentran en el Parque Los Escritores de Mérida, todos, de una u otra manera, tienen relación con mi familia, mi abuelo Julio Salas, él si fue un escritor. Mariano Picón Salas, primo hermano de papá y mamá, pero yo, humildemente decidí plasmar, escribir sobre las memorias de la familia. Me interesé en dar a conocer cómo era que vivían aquí en los Andes, cómo fue que fueron llegaron desde los años 1500, porque somos una familia muy vieja en este estado, la historia de Mérida es la historia de mi familia, y la historia de mi familia es la historia de Mérida, porque estamos metidos por todas partes”.

Respecto a su actual oficio de escribir, señala que es sólo es una dedición. “El profesor Miguel Ángel Rodríguez dice que soy una escritora reciente, es mejor decir que soy una escritora tardía, porque nunca me había atrevido. Yo estudié Biología pero no me llegué a graduar, mi marido era biólogo e investigador por eso fui por ese rumbo, pero un buen día dije y por qué no escribir, entonces conocí a la periodista Milagros Socorro, y luego de un año bajo su tutela hice mi primer libro que publicó la Fundación Polar”.

Comenta la escritora que el libro “Caminos y fogones de una familia merideña”, contó con buena receptividad, ya que en él se cuenta el periplo de lo que era viajar de Mérida a Caracas en 1917. “Yo también quise contar en este libro acerca de nuestras recetas de cocina, porque habían libros de recetas dentro de la familia muy bellos, que me daba dolor se perdieran esas recetas, así relató acerca de cada etapa en que la familia iba llegando a cada pueblo,  qué cenaron, qué comieron, claro hay un poco de fantasía porque yo no los acompañé, pero deduzco que si llegaron a Mucuchíes comieron una gallina rellena, en Apartaderos tomaron una pizca, y fue así como fui describiendo los distintos platos en el libro.

La familia: una marca

La señora Julieta Salas de Carbonell comentó que estuvo casada con Luis Carbonell Parra, hijo de Diego Carbonell quien fue rector de la Universidad de Los Andes,  a quien recuerda como un Rector revolucionario, pues cuando llegó a Mérida fue mirado con muy malos ojos porque decía que era libre pensador, masón.

“Pero se enamoró y se casó con mi suegra que había venido a visitar a las viejitas Guerra Campo Elías, descendientes del Héroe Vicente Campo Elías, quien estaba casado con Martina Rodríguez Picón. El cuento es, que se casa con mi suegra, hija de Caracciolo Parra Picón, quien trajo la luz eléctrica para Mérida, y esa es una deuda que tengo con el abuelo-suegro, porque el doctor Ramón Velázquez, me dijo que yo tenía que escribir sobre esa epopeya que fue traer las turbinas desde el Lago de Maracaibo en carreta tirada por bueyes. La mamá de mi suegra, era Cristina Salas Candales, su abuelo era un maestro de escuela, entonces yo ya estoy casada con un primo, por los Parra Salas, ella era hija-nieta de Luis María Salas Roo, hermano de Federico Salas Roo, abuelo de Mariano Picón Salas, primo hermano de papá y mamá. Merideño se casa con merideña, hasta que llegaron los italianos, y como decía una prima ninguna se quedó soltera”. (Yasmira Carrasquero. CNP 12405. Prensa ULA)