Equipo Rectoral trató el tema de las invasiones en Visión Universitaria

Defienden el crecimiento de la ULA como un aporte social

 

Luego de la invasión que sufriera el terreno perteneciente a la Universidad de Los Andes (ULA) ubicado en el sector Campo de Oro, este lunes el programa del rectorado de la universidad, Visión Universitaria, presentó una edición especial en donde estuvo invitado todo el Equipo Rectoral, mostrando tal y como lo expresaron, que a la hora de defender a la institución todos los universitarios se unen.

En esta edición de Visión Universitaria todas las autoridades coincidieron al reconocer que en el estado Mérida existe un problema habitacional, sin embargo, destacan que la invasión no es el camino para solucionar esta situación, por el contrario, afirman que desde la ULA se ha propuesto una serie de proyectos orientados a esta problemática que no han sido escuchados por las autoridades, agregando que desde la institución están dispuestos a continuar tendiendo la mano a la población en esta materia.

En ese sentido, las autoridades agregaron además que la labor social de la Universidad se da por otros caminos, siendo precisamente un ejemplo la construcción del Campo Biomédico en el terreno que fue invadido el viernes, el cual vendrá a aportar un incremento de la matrícula estudiantil además de avanzados laboratorios para la investigación, mejorando así la cantidad y la calidad de los profesionales de la salud en el país.

Asimismo, el rector de la ULA, Mario Bonucci, resaltó el crecimiento que ha experimentado la ULA durante las últimas décadas, estableciéndose plenamente en los 3 estados de la región andina, beneficiando de esta manera cada vez más a la colectividad venezolana.

En su intervención el vicerrector administrativo, Manuel Aranguren, expresó que con las invasiones a la ULA se cometió un grave error, sin embargo, resaltó que desde hace 50 años ningún gobierno ha planteado soluciones habitacionales efectivas. Además, destacó que ante estos ataques sufridos por la institución no es el Equipo Rectoral el que sale en su defensa, sino toda la comunidad universitaria.

Igualmente, el Vicerrector Administrativo explicó que la Universidad no puede desarrollar todos sus proyectos de la noche a la mañana teniendo en cuenta la gran serie de factores que actúan a la hora de ejecutar un proyecto, resaltando la parte presupuestaria; Aranguren explicó esto ante las acusaciones que se han hecho a la institución afirmando que el terreno de Campo de Oro se encuentra abandonado desde hace varios años.

Aranguren afirmó que en los próximos días comenzará el movimiento de tierra para la construcción de la nueva sede de la Facultad de Odontología, con lo cual se marca el inicio de la construcción del Campo Biomédico más avanzado del país.

Por su parte el secretario de la ULA, José Andérez, se refirió al crecimiento que podría haber alcanzado la institución si tuviese un presupuesto lógico, que incluya el crecimiento natural y los recursos necesarios para la ejecución de proyectos, destacando que gracias a ese desarrollo que en años pasados consiguió la institución miles de jóvenes tuvieron acceso a la educación superior.

La vicerrectora académica, Patricia Rosenzweig, explicó que Plandes puede brindar toda la información necesaria sobre los proyectos que maneja la universidad para sus diferentes terrenos, lo que les excluye de la aplicación de la Ley de Tierras Urbanas de acuerdo a lo establecido en su Artículo 36.

Asimismo, la Vicerrectora Académica afirmó que es responsabilidad de todos los merideños luchar para la consolidación de los proyectos de la Universidad y darles continuidad, ya que es la sociedad la principal beneficiada de éstos. Finalmente, resaltó que muchos de los gobernantes del estado Mérida son hijos de la ULA, por lo que les hace un llamado a que ayuden a la universidad a crecer poco a poco pero con paso firme, en lugar de limitar su desarrollo.

Finalmente, estuvo presente el decano de la Facultad de Odontología, profesor Justo Bonomie, quien expresó la gran preocupación que se generó dentro de los estudiantes y egresados de la Facultad al ver amenazado el crecimiento de ésta. No obstante, Bonomie reconoció la necesidad de muchos ciudadanos respecto a la vivienda, problema que a su juicio “debe ser solucionado sin que se afecte el crecimiento de la universidad”, pues así se afectaría a la sociedad también.

Finalmente, el decano de la Facultad de Odontología expresó que la universidad no crece “por capricho”, sino que ésta debe crecer para abrir sus puertas a más venezolanos, explicando que en la última prueba de ingreso de la facultad un total de 2 mil bachilleres presentaron, pero solamente 70 podrán ingresar por una razón de lógica: no hay espacio para albergarlos.

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