Marcha inmunizada con unidad y lucha por presupuesto idóneo
La unidad en torno a la universidad, fue posible gracias a una multivariada presencia de factores que convergieron en la necesidad de exponer, ante la colectividad venezolana, la justa petición de presupuesto idóneo para el funcionamiento cabal de las casas de estudios superiores.
La marcha universitaria que colmó este miércoles 29 de abril, avenidas y calles de la ciudad de Mérida, pudo sentir el firme ánimo de quienes tienen la convicción de que las máximas casas de estudios permanecen en el tiempo. Igualmente se constata su rol de investigar y formar ciudadanos, frente a la obligación de los gobiernos de turno, de proveer los recursos para una educación de calidad.
La línea mediática de estos últimos días, centrada en la gripe porcina y repentinas decisiones sanitarias “preventivas” de organismos regionales de salud, fue un abono que intentó amilanar la organización y la presencia de la gente en esta marcha.
No obstante, la respuesta fue contundente. Universitarios del Zulia, de Carabobo, de Oriente, de la capital venezolana, de los llanos, del Táchira y de Trujillo, conformaron un sólido frente de protesta en el recorrido que partió desde las adyacencias de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (Faces) y culminó frente al Edificio Administrativo de la ULA, en la avenida Don Tulio Febres Cordero.
El sector empresarial y comercial también alzó su voz, al igual que las “Madres de Negro” de la ciudad de Mérida. Gremios universitarios y parauniversitarios, mostraron solidaridad, como es el caso de la Asociación Venezolana de Rectores Universitarios (Averu) y la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv).
Durante el recorrido, se notó un ambiente festivo y pacífico en la muchedumbre. Los comercios del casco central de la ciudad permanecieron abiertos en señal de alta confianza a la motivación de la marcha. Los piquetes policiales se apostaron cuadras arriba de la ruta y un grupo de motorizados civiles la orientaron a falta de los policías viales.
En la tarima de cierre de la actividad académica, pudieron escucharse expresiones concordantes, entre las vocerías que tomaron la palabra. Las intenciones de transformar a la universidad venezolana en una especie de liceos en donde sólo se imparten clases, fue absolutamente reprobada. Insistieron en que la Universidad es fundamental en la generación de ideas, proyectos e investigaciones que, llevadas a la práctica, fungen como respuestas a muchos problemas y necesidades de la sociedad venezolana.
Para estos efectos de desarrollo, es menester poder contar con un presupuesto que, en definitiva, se invierte en el crecimiento del país a través de las estructuras académicas.
La marcha universitaria de Mérida es apenas un comienzo de las venideras que se organizarán, con igual propósito, en otras entidades del país. Así lo aseguraron varios dirigentes presentes, entre ellos, el bachiller Ricardo Sánchez, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela.